Giovani Custodero, portero del Fasano de fútbol sala italiano.

Giovanni Custodero era, hasta hace bien poco, el portero del Fasano italiano, un equipo de fútbol sala. El cáncer le asaltó y desde entonces comenzó una batalla de la que se están disputando las últimas refriegas, según él mismo ha confesado en facebook.

A finales de 2019, Custodero compartió una carta en la red social en la que confesaba que no podía más. El sarcoma óseo que padece le estaba causando un sufrimiento imposible de sostener. Tras cuatro años, seis cirugías y varios ciclos de quimioterapia, había quedado postrado en la cama. «Estoy al límite de mis fuerzas», admitía antes de cerrar el año.

En su última publicación, escrita por él mismo, admite que no va a luchar más. Se ha rendido al dolor. Su despedida es desgarradora:

«Llegamos a la batalla final. Somos él y yo, el uno contra el otro. Le miro a la cara. Entiendo que la energía con la que le he alimentado se ha hecho fuerte, pero yo ya estoy cansado. Decidí pasar las fiestas lejos de las redes sociales, pero al lado de las personas más importantes para mí. Ahora que han terminado, y junto a ellos con el último grano de fuerza que me quedaba, decidí que no puedo aguantar más el dolor físico y el sufrimiento sobre lo que el destino tiene preparado para mí.

Mañana entraré en sedación profunda y podré aliviar mi malestar. Espero haber ayudado a mucha gente. Por eso quiero, por última vez, agradecer por lo que habéis sido, sois y seréis siempre: mi fuerza.