Frank Lampard ya no es entrenador del Chelsea. La deriva que ha tomado el conjunto londinense ha hecho que el que fuera jugador ya no resista en el puesto, y Roman Abramovich ha decidido despedirle.

Pese a que su marcha (para nada sorpresiva) ha supuesto una determinación muy dura para la directiva y para él personalmente por el afecto y el respeto que tiene sobre Lampard.